casa de piedra romántica rodeado por un jardín de oliva con bonitas vistas, perfecto para una pareja que quiera relajarse y disfrutar de la tranquilidad. La casa es de 1000 metros de distancia del mar. Hay una terraza con vistas al mar y otra con una chimenea y una mesa grande donde se puede tratar de hacer deliciosas comidas locales. También hay un aparcamiento privado en su disposición.