La casa está totalmente equipada, ubicada en la naturaleza, no hay gente a su alrededor, solo unos pocos aldeanos, pájaros y animales domésticos. No hay estrés, prisa en las colinas dálmatas, vegetación en todas partes, descanso para el alma. Nuestros huéspedes disfrutan de excursiones, comidas tradicionales, socializar con animales domésticos. También disfrutan de las hermosas playas y el sol. La casa está a 15 minutos del mar, tiene una piscina para refrescarse y disfrutar del sol. Nos hemos asegurado de que nuestros huéspedes tengan privacidad y paz máxima. Participe en actividades tanto como lo desee.